jueves, 14 de agosto de 2014

Más allá de los libros...


Tengo una amistad reciente con un par de esposos médicos jubilados que me han hecho reflexionar sobre cómo y hasta cuando realmente una persona tiene la actitud de seguirse preparando mediante el estudio para ofrecer un servicio que la población requiere, que sea de calidad y en cumplimiento de todas las normas, aunque todos sus conocidos pudieran llegar a pensar que prácticamente tienen resuelta su vida y ya concluida su actividad laboral, ellos están empeñados en incrementar la calidad de vida de los pacientes que se acerquen a ellos.

Mi Esposa se ha puesto a estudiar y es increíble la forma de exigirse un excelente resultado, no solo bueno, ni muy bueno, ella quiere excelente o nada y eso me parece un buen ejemplo para los que estamos alrededor (me incluyo), porque vemos el esfuerzo que se realiza día a día esperando que la motivación nunca se acabe, la misma motivación que tienen mis amigos médicos para seguir incrementando sus conocimientos en favor de los pacientes.

Mis hermanas también tienen ese algo que las lleva de regreso a las aulas, hay algo allí que atrae, no sé si es el ambiente estudiantil, las actividades propias de una escuela o el simple hecho de sentirse jóvenes pero con la inevitable mezcla de la experiencia que las hace tomar el justo valor de las cosas y aprovechar al máximo la oportunidad de estar allí, como catedráticas y como alumnas también.

Muchos de nosotros no hemos seguido preparándonos en una institución después de la Licenciatura aunque creemos que lo hacemos solo leyendo libros (mi caso), pero me estoy convenciendo de que no es suficiente, investigando información del INEGI me doy cuenta que estoy dentro del 80% de los egresados de Licenciatura que no estudian un Posgrado.

Estudiar un Posgrado y estar mejor preparado incrementa la posibilidad de tener un mejor puesto de trabajo y una mejor ventaja ante una oportunidad, las empresas buscan personas más preparadas y especializadas en áreas específicas porque pueden desarrollar muchos más casos prácticos, elevar el nivel de pensamiento crítico y un punto de vista más objetivo.

Creo que este Blog es para mi, me estoy convenciendo de que no debo dejar pasar mucho tiempo para seguirme preparando, aunque para hacerlo no hay edad, recientemente leí que un niño Británico que a sus 4 años ya había leído 940 libros y que ubicaba perfectamente todos los países del mundo, por otro lado, una mujer Mexicana Arcelia Yañiz Rosas recibió su título de Periodista a los 95 años, repito, no importa la edad.

Aunque creo que con la madurez se alcanzan otras percepciones y se identifican mejor los temas centrales, con la madurez se incrementa la habilidad para analizar y resolver problemas, por lo que, cualquier cosa que nos propongamos a estudiar lo haremos mejor y con mayor claridad que cuando eramos chavos.

La educación en una institución impacta positivamente nuestra vida diaria, tenemos la ventaja de prepararnos y cultivarnos en los temas que realmente nos interesan superando obstáculos que hemos experimentado en nuestras labores diarias, se obtiene un avance en lo personal y el lo profesional, además de que adquieres el sentido de logro personal.

En este momento me voy a dar a la tarea de buscar opciones en instituciones que nos brinden calidad en la educación y buscar mi desarrollo y porqué no, el de mi país, para que incrementemos ese porcentaje del 0.01% de la población que estudia un posgrado, si tu ya lo tienes, cuenta tu historia y platícanos que hay más allá de los libros.