jueves, 4 de febrero de 2016

¿Congruencia o Coherencia o las dos cosas?




Hace un tiempo, un buen amigo me regaló un libro que me abrió el panorama empresarial - laboral, de hecho, desde que lo empecé a leer, he aplicado muchas cosas que fui aprendiendo, también muchas de las ideas que he plasmado en este blog vienen de ese libro, claro, hablando del ámbito empresarial, ya he leído algunos otros libros y le he sumado aprendizajes mediante la experiencia, sobre todo en sistemas de gestión de calidad, me he hecho mi propia forma de dirigir una empresa y lo tomo como una filosofía de trabajo que fomento día a día entre mis colaboradores.

Debo admitir que mi filosofía se basa en el libro "Una empresa admirada: La receta" del exitoso empresario Salvador Alva, quién transmite mediante la lectura su experiencia en la dirección de empresas de Pepsico y te dice la formula (sin secretos) de como se deben entender y alinear algunos conceptos que todas las empresas deben tener y fomentar entre sus empleados.




Muchas veces es complicado tratar de explicar y convencer a alguien más de entrar en un proceso de transformación de la cultura organizacional, es igualmente complicado hacer que todos tus colaboradores lean el libro y que lo apliquen, por lo que no nos queda más que armarnos de valor y empezar a fomentar poco a poco la nueva filosofía que transformará cualquier empresa en una empresa admirada, nadie dijo que los cambios culturales son fáciles y rápidos, por lo que se requiere mucha paciencia y ser constantes.

Cuando hablamos de congruencia o coherencia entre lo que decimos que somos y hacemos, estamos hablando de una "alineación" entre nuestros pensamientos y nuestros actos, voy a poner un ejemplo de lo que NO está alienado: Cuando entre nuestros valores empresariales decimos que tenemos Personal confiable, pero los guardias de seguridad tienen la instrucción de revisarles la cajuela del carro cada vez que salen o colocan cámaras de seguridad cada 3 metros, algo no cuadra, ¿son confiables o no son confiables?; a eso me refiero cuando no están alineados con las políticas, por lo mismo no son congruentes ni coherentes.

Estar alineados como organización es enfocarte en realizar todos los procesos y actividades pensando en la satisfacción del cliente como "centro de atención", cumpliendo o tratando de cumplir los principios que la rigen, buscando ser mejor y diferente, cuando el líder logra que sus seguidores adopten el proceso de transformación porque están convencidos de que quieren ser diferentes y únicos, entonces estará cerca de ser una empresa admirada.

Así que cuando escuches o leas un eslogan, una política, unos valores, observa detenidamente el comportamiento del personal que labora en esa empresa y analiza si está alineado con sus principios laborales o si sus procesos están enfocados en la satisfacción del cliente,  las políticas y los procesos deben hacerse pensando en el cliente y pensando en la continuidad del negocio, no solo deben ser palabras bonitas enmarcadas en cuadros que cuelgan en las paredes de las oficinas, éstas deben ser bien pensadas, diseñadas para que plasmen el objetivo y dirección de la empresa, éstas deben hacerse realidad en la organización para que todos los procesos sean congruentes o coherentes con las políticas y éstas deben ser una cultura que se fomenta y promociona día con día.

Alineación, congruencia o coherencia son diferenciadores que harán de tu empresa, ser una empresa admirada y por eso los clientes te van a elegir.

Gracias Fer.

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